Lunes 17 de octubre de 2022
Francisco Manser Araos
Capitán de Altos
El Capitán de Altos (cargo dado en los buques a vela al personal cuya labor consistía en ordenar y supervisar las maniobras de aparejo y velas altas), nació en Chiloé, hijo de José Manser y Antonia Araos. No se conocen hasta ahora mayores antecedentes de su vida anterior al año 1879, sólo que se enroló en la Armada el 14 de febrero de aquel año.
En el inicio de la campaña marítima durante la Guerra del Pacífico, el plan del gobierno chileno fue el de dividir la Escuadra en dos divisiones, con el objetivo de atacar los puertos de Huanillos, Mollendo, Pabellón de Pica y Pisagua.
El 18 de abril zarparon desde Iquique hacia Pisagua el blindado “Blanco Encalada” y la corbeta “Chacabuco”, y al llegar a su destino, se enviaron botes con la misión de tomar las lanchas usadas en las faenas de carga del salitre que se encontraban en la bahía. Cuando los botes estuvieron cerca de la costa, fueron víctimas de un ataque de fusilería, lo que dejó varios heridos y a unb fallecido, identificado como Francisco Manser. Lo anterior, llevó al Almirante Williams a ordenar el regreso de la flotilla y a usar la artillería de su nave, disparando sobre la parte sur del pueblo, lugar desde donde se habían originado los disparos sobre los botes.
Refiriéndose al tema, el historiador naval, Rodrigo Fuenzalida Bade, en el tomo III del libro “La Armada de Chile, desde la Alborada al Sesquicentenario”, página 743 dice: “Estas acciones ofensivas que sólo lograron un muerto, un capitán de altos de la “Chacabuco”, llamado Manzel [sic] y varios heridos, entre ellos un guardiamarina y un consumo de combustible y munición considerables, no lograron nada positivo”.
Respecto de la muerte de Manser, en el libro “Diario de Edwin John Penton”, en su página 39, correspondiente al día jueves 17 de abril, se encuentra la siguiente cita: “A las 12 am, cuando los botes involucrados estaban hundiendo la última de las embarcaciones, una descarga de mosquetes abrió fuego contra los botes, la cual desafortunadamente mató a un hombre instantáneamente, atravesándole una bala la cabeza”.
También en el mismo texto, el viernes 18 de abril de 1879, página 41: “A las 10 pm, enterramos al hombre que resultó muerto ayer. Después de ser echado al agua por la borda desde una pasarela, uno de nuestros tenientes hizo un discurso sobre él, siendo el primer hombre muerto en el mar desde la declaración de guerra con el Perú y esperaba que cada hombre se levantara por su país…”
Asimismo, en la bitácora del blindado “Almirante Cochrane” se puede leer en los acaecimientos del viernes 18 de abril, en el cuarto de 12 a 4: “De la jente de los botes mataron uno i hirieron a cuatro”.
De igual modo, en el libro “Guerra del Pacífico, Recopilación Completa de Todos los Documentos Oficiales, Correspondencias y Demás Publicaciones Referentes a la Guerra”, del autor Pascual Ahumada Moreno, Tomo I, páginas 232 y 233, se encuentra lo siguiente, relacionado con la muerte de Manser: “El bombardeo de Pisagua fue ocasionado por una felonía de tierra. La primera expedición de botes fue a recoger las lanchas i se la recibió a balazos. La escuadra protegió los botes con sus disparos, i los peruanos arriaron sus banderas. Entonces se mandó una segunda expedición con el mismo objeto, que fue recibida traidoramente a balazos. Se bombardeó entonces el puerto. La mayor parte reducida a cenizas. Número incalculable de muertos en tierra. Chilenos, un muerto i seis heridos”.
Más adelante, en las páginas 237 y 238 se lee: “Diario de la campaña marítima. Abril, a bordo del “Blanco Encalada”. Día 18 – Hoy, a las 4 A.M., principiamos a movernos con rumbo al Norte i como a las siete i media estábamos dentro de la rada de Pisagua.
…Como iba delante de nosotros (la Chacabuco) llegó primero i sobre la marcha arrió botes para ir a ejecutar la operación de recoger las lanchas de la rada i destruirlas en seguida para imposibilitar el embarque de salitres i mercaderías. No le salió el asunto mui a cuentas, pues la guarnición de este puerto, fuerte de dos mil hombres, esperó emboscada en las casas de la orilla del mar i detrás de los peñascos, que se acercase lo suficiente para hacerle un fuego, como se lo hicieron verdaderamente mortífero, i fué maravilla, en verdad, que hubiera quedado alguien vivo en las embarcaciones, pues a un bote tirándole con calma es de no perder tiro, yendo dirigidos a una aglomeración de hombres que ofrecen un blanco considerable. Sin embargo, un hombre murió, natural de Chiloé i de apellido Mancer [sic], casado en Valparaíso i que deja dos pequeñas criaturas en la más triste horfandad. Además, otros tres marineros heridos, dos de gravedad i uno levemente. También uno de los guardia – marinas, señor Carrasco, en una pierna, siendo su herida leve también”.
Existen en esta obra otras varias alusiones a este primer marino muerto en la guerra que se refieren a los mismos hechos y sería redundante reproducir.
En definitiva, pese a que la muerte de Manser, Capitán de Altos de la corbeta “Chacabuco”, ocurrida durante el bombardeo de Pisagua el 18 de abril de 1879 no puede definirse como un hecho decisivo en el contexto general de la historia de este conflicto armado, bien puede ser reconocido y destacado en los anales de esta guerra, por tratarse del primer marino en dar la vida por su patria, lo que de alguna u otra manera fue un aliciente para que sus compañeros desearan seguir su ejemplo y a medida que el suceso se fue haciendo más conocido, se constituyera en el primer sacrificio postrero de un servidor naval en el devenir de la guerra.
Francisco Manser estaba casado con Francisca Bernal y era padre de dos hijos. Luego de su fallecimiento fue sepultado en altamar con todos los honores correspondientes a un héroe, constituyéndose de esta manera en el primer marino muerto en acción de combate durante la Guerra del Pacífico.
Información gentileza del Museo Guerra del Pacífico Domingo de Toro Herrera