Soldados Infantes de Marina del Servicio Militar concluyen Período de Instrucción en el CENBIM
La ceremonia contó con la presencia del Comandante General del Cuerpo de Infantería de Marina y Comandante de la Brigada Anfibia Expedicionaria, Contraalmirante Jorge Keitel.
Talcahuano. El esfuerzo demostrado por los Soldados Infantes de Marina del Servicio Militar durante los cuatro meses de instrucción en el Centro de Entrenamiento Básico del Cuerpo de Infantería de Marina (CENBIM), se vio reflejado este 29 de agosto, al dar término a este período con el solemne acto de juramento a la Bandera ante las autoridades y sus familias.
Los jóvenes que voluntariamente optaron por cumplir con este deber cívico en la Armada de Chile, adquirieron este compromiso ante Dios, la Patria y la ciudadanía, el que fue sellado con una salva de honor y la declamación del decálogo del Infante de Marina, que resalta las virtudes y valores que caracterizan a los Soldados del Mar, como la fortaleza, la lealtad, la astucia, el coraje, entre otros.
El Comandante General del Cuerpo de Infantería de Marina y Comandante de la Brigada Anfibia Expedicionaria, Contraalmirante Jorge Keitel, quien presidió la ceremonia, agradeció a los padres la confianza depositada en la Armada de Chile y en especial en el Cuerpo de Infantería de Marina, para instruir a sus hijos y pupilos en este proceso de formación militar, “ustedes son testigos de los cambios que ellos han tenido en este tiempo, se deben sentir orgullosos de sus hijos, porque los que están aquí formados han pasado duras pruebas y no todos lograron llegar al final del cometido”, resaltó.
Al dirigir sus palabras a los jóvenes soldados, el Contraalmirante Keitel les manifestó, que “al concluir este extenuante y duro período se deben sentir orgullosos por lo que son, por lo que hicieron y de pertenecer a esta fuerza de élite, que es la Infantería de Marina. Ustedes hicieron algo importante para la Patria y por sí mismos. Ahora que se integrarán a las distintas unidades de la Infantería de Marina les pido que contribuyan a mantener el prestigio que tenemos los Infantes de Marina en todo Chile y el mundo”.
Premiación
En el marco de esta ceremonia, se premió a los alumnos más destacados del curso de Combatiente Básico Anfibio, distinción que le fue otorgada al Soldado Pablo Carvallo Lagos, como mejor tirador con fusil y al Soldado Ángelo Aragundi Sepúlveda, por mejor estándar físico.
También se destacó a los Soldados Dain Remenzoni Peredo y Edison Valenzuela Azocar, como el mejor Combatiente Infante de Marina, quienes obtuvieron la nota más alta al término del curso.
Asimismo, se impuso la medalla “18 de Septiembre”, a las dos primeras antigüedades del periodo de formación del presente año, la que le fue conferida a los soldados Camilo Morales Carrasco y Ángelo Aragundi Sepúlveda, con el segundo y primer lugar respectivamente.
Con el legítimo orgullo de haber cumplido con su primera meta en la institución, ambos jóvenes destacaron el aprendizaje adquirido en el CENBIM. “Por mi familia me motivé y esforcé. Yo no vine aquí solo a hacer el Servicio Militar, sino que vine a ser el mejor en representación de mi familia”, indicó el Soldado Morales.
En tanto, el Soldado Aragundi añadió que lo más complicado en este periodo fue la lejanía de la familia, “pero me motivó a esforzarme para lograr ser un Infante de Marina. Mi expectativa es ingresar a la Escuela de Grumetes para continuar esta formación, porque lo que más me gustó es el espíritu de cuerpo, el entrenamiento y sobretodo el régimen disciplinario”.
El Jefe del CENBIM, Capitán de Fragata IM Manuel Montes, destacó que esta ceremonia fue para reconocer el esfuerzo, la dedicación y el compromiso de un grupo de jóvenes, “que durante cuatro meses se sometieron a uno de los procesos de formación más rigurosos y exigentes que nuestra institución tiene para ofrecer en el Centro de Entrenamiento Básico del Cuerpo de Infantería de Marina, que tiene la misión de transformar a estos jóvenes en Soldados del Mar, inculcando en ellos un profundo sentido del deber, la responsabilidad y la lealtad hacia nuestra nación (…)”.
A lo que añadió a los nuevos Soldados del Mar, que “el camino que los ha traído aquí ha sido arduo y desafiante. Durante estas semanas de intenso entrenamiento han sido forjados en el crisol de la disciplina y la dedicación. Han superado innumerables desafíos físicos y mentales, han aprendido a trabajar en equipo, a confiar en el compañero que tienen a su lado y a enfrentar con valor cualquier obstáculo. Hoy reciben simbólicamente la piocha del torreón y los cañones cruzados, una insignia que han ganado tras aprobar la prueba final de combatiente básico anfibio, la que no solo representa un logro personal, sino que es un legado bicentenario que deben llevar con orgullo, porque simboliza la tradición, el valor y el compromiso de quienes han defendido nuestra patria antes que ustedes”, les resaltó.